viernes, 19 de febrero de 2021

#Informe #SeguridadNacional #20210219 @GobiernoMX

#Informe #SeguridadNacional

#Importante

Conferencia de prensa en vivo, 

desde Palacio Nacional. 

Viernes 19 de febrero 2021

Presidente @lopezobrador_

@GobiernoMX

https://youtu.be/PgN3iXENua4

 via @YouTube 


Si cambian las circunstancias

cambiamos nosotros...

Si se garantiza con trabajo, con estudio

haremos una sociedad mejor…

Si hay profesionalismo, 

Si hay trabajo coordinado,

Si hay combate a la corrupción.

Frase

@lopezobrador_

@GobiernoMX


Exhorto a la Unidad 

de los pueblos Triquis

por la paz.

Y perdonarnos 

porque son muchos los agravios.

Nada por la fuerza,

Todo por la razón y el derecho.

Y exige de mucho diálogo y paciencia.

@lopezobrador_

@GobiernoMX

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"Señor presidente del Senado:

Por tratarse de un asunto urgentísimo 

para la salud de la Patria, 

me veo obligado a prescindir 

de las fórmulas acostumbradas 

y a suplicar a usted 

se sirva dar principio a esta sesión, 

tomando conocimiento de este pliego 

y dándolo a conocer enseguida 

a los señores senadores. 

Insisto, señor Presidente, 

en que este asunto debe ser conocido 

por el Senado en este mismo momento, porque dentro de pocas horas lo conocerá 

el pueblo 

y urge que el Senado lo conozca 

antes que nadie.


Señores senadores:


Todos vosotros habéis leído 

con profundo interés el informe presentado 

por don Victoriano Huerta 

ante el Congreso de la Unión 

el 16 del presente. 

Indudablemente, señores senadores, 

que lo mismo que a mí, 

os ha llenado de indignación 

el cúmulo de falsedades 

que encierra ese documento. 

¿A quién se pretende engañar, señores? 

¿Al Congreso de la Unión? 

No, señores, 

todos sus miembros son hombres ilustrados 

que se ocupan en política, 

que están al corriente de los sucesos del país 

y que no pueden ser engañados 

sobre el particular. 

Se pretende engañar a la nación mexicana, 

a esa patria que confiando 

en vuestra honradez y vuestro valor, 

ha puesto en vuestras manos 

sus más caros intereses.


¿Qué debe hacer en este caso 

la representación nacional? 

Corresponder a la confianza 

con que la patria la ha honrado, 

decirle la verdad y no dejarla caer 

en el abismo que se abre a sus pies. 

La verdad es ésta: 

durante el gobierno de don Victoriano Huerta, 

no solamente no se hizo nada 

en bien de la pacificación del país, 

sino que la situación actual de la República, 

es infinitamente peor que antes: 

la Revolución se ha extendido 

en casi todos los estados; 

muchas naciones, 

antes buenas amigas de México, 

rehúsanse a reconocer su gobierno, 

por ilegal; 

nuestra moneda encuéntrase 

depreciada en el extranjero; 

nuestro crédito en agonía; 

la prensa de la República amordazada, 

o cobardemente vendida al gobierno 

y ocultando sistemáticamente la verdad; nuestros campos abandonados; 

muchos pueblos arrasados y, 

por último, 

el hambre y la miseria en todas sus formas, 

amenazan extenderse rápidamente 

en toda la superficie 

de nuestra infortunada patria. 

¿A qué se debe tan triste situación? 

Primero, y antes de todo, 

a que el pueblo mexicano 

no puede resignarse a tener 

por Presidente de la República 

a don Victoriano Huerta, 

al soldado que se apoderó del poder 

por medio de la traición 

y cuyo primer acto al subir a la presidencia 

fue asesinar cobardemente al presidente 

y vicepresidente legalmente ungidos 

por el voto popular; 

habiendo sido el primero de éstos, 

quien colmó de ascensos, honores 

y distinciones a don Victoriano Huerta 

y habiendo sido él, igualmente, 

a quien don Victoriano Huerta juró 

públicamente lealtad 

y fidelidad inquebrantables. 

Y segundo, 

se debe esta triste situación a los medios 

que Victoriano Huerta 

se ha propuesto emplear, 

para conseguir la pacificación. 

Estos medios ya sabéis cuáles han sido: 

únicamente muerte y exterminio 

para todos los hombres, familias 

y pueblos que no simpaticen con su gobierno.


"La paz se hará cueste lo que cueste", 

ha dicho don Victoriano Huerta. 

¿Habéis profundizado, señores senadores, 

lo que significan esas palabras 

en el criterio egoísta y feroz 

de don Victoriano Huerta? 

Estas palabras significan 

que don Victoriano Huerta está dispuesto 

a derramar toda la sangre mexicana, 

a cubrir de cadáveres todo el territorio nacional, 

a convertir en una inmensa ruina 

toda la extensión de nuestra patria, 

con tal de que él no abandone la presidencia, 

ni derrame una sola gota de su propia sangre. 

En su loco afán de conservar la presidencia, 

don Victoriano Huerta está cometiendo 

otra infamia; 

está provocando 

con el pueblo de Estados Unidos de América 

un conflicto internacional en el que, 

si llegara a resolverse por las armas, 

irían estoicamente a dar y a encontrar 

la muerte todos los mexicanos sobrevivientes 

a las amenazas de don Victoriano Huerta, todos, 

menos don Victoriano Huerta, 

ni don Aureliano Blanquet, 

porque esos desgraciados 

están manchados con el estigma de la traición, 

y el pueblo y el ejército los repudiarían, 

llegado el caso.


Esa es, en resumen, la triste realidad. 

Para los espíritus débiles parece 

que nuestra ruina es inevitable, 

porque don Victoriano Huerta se ha adueñado 

tanto del poder, 

que para asegurar el triunfo de su candidatura 

a la Presidencia de la República, 

en la parodia de elecciones anunciadas 

para el 26 de octubre próximo, 

no han vacilado en violar la soberanía 

de la mayor parte de los estados, 

quitando a los gobernadores constitucionales 

e imponiendo gobernadores militares 

que se encargarán de burlar a los pueblos 

por medio de farsas ridículas y criminales. 

Sin embargo, señores, 

un supremo esfuerzo puede salvarlo todo. 

Cumpla con su deber 

la representación nacional 

y la patria está salvada 

y volverá a florecer más grande, más unida 

y más hermosa que nunca. 

La representación nacional debe deponer 

de la presidencia de la República 

a don Victoriano Huerta por ser él 

contra quien protestan con mucha razón 

todos nuestros hermanos alzados en armas 

y de consiguiente, 

por ser él quien menos puede llevar a efecto 

la pacificación, 

supremo anhelo de todos los mexicanos. 

Me diréis, señores, 

que la tentativa es peligrosa 

porque don Victoriano Huerta 

es un soldado sanguinario y feroz, 

que asesina sin vacilación ni escrúpulo 

a todo aquél que le sirve de obstáculo. 

¡No importa, señores! 

La patria os exige que cumpláis 

con vuestro deber, 

aun con el peligro 

y aun con la seguridad de perder la existencia. 

Si en vuestra ansiedad de volver a ver reinar 

la paz en la República os habéis equivocado, habéis creído en las palabras falaces 

de un hombre que os ofreció pacificar 

a la nación en dos meses 

y le habéis nombrado 

presidente de la República, 

hoy que veis claramente que éste hombre 

es un impostor inepto y malvado, 

que lleva a la patria con toda velocidad 

hacia la ruina, 

¿dejaréis por temor a la muerte 

que continúe en el poder? 

Penetrad en vosotros mismos, señores, 

y resolved esta pregunta: 

¿Qué se diría a la tripulación de un gran navío 

que en la más violenta tempestad 

y en un mar proceloso, 

nombrara piloto a un carnicero que, 

sin ningún conocimiento náutico 

navegara por primera vez 

y no tuviera más recomendación 

que la de haber traicionado y asesinado 

al capitán del barco?


Vuestro deber es imprescindible, señores, 

y la patria espera de vosotros 

que sabréis cumplirlo. 

Cumpliendo ese primer deber, 

será fácil a la representación nacional cumplir 

con los otros que de él se derivan, solicitándose enseguida 

de todos los jefes revolucionarios 

que cesen toda hostilidad 

y nombren sus delegados 

para que de común acuerdo, 

nombren al presidente que deba convocar 

a elecciones presidenciales 

y cuidar que éstas se efectúen 

con toda legalidad.


El mundo está pendiente de vosotros, 

señores miembros 

del Congreso Nacional Mexicano, 

y la patria espera que la honraréis 

ante el mundo, 

evitándole la vergüenza de tener 

por primer mandatario a un traidor y asesino.


Dr. Belisario Domínguez, 

Senador por el estado de Chiapas.


NOTA.- 

Urge que el pueblo mexicano 

conozca este discurso 

para que apoye a la Representación Nacional, 

y no pudiendo disponer de ninguna imprenta 

recomiendo a todo el que lo lea, 

saque cinco o más copias, 

insertando también esta nota 

y las distribuya entre sus amigos 

y conocidos de la capital y de los Estados."


La noche del 7 de octubre de 1913 

fue sacado de su habitación en el hotel 

y conducido al cementerio de Xoco, 

en Coyoacán, 

donde fue martirizado 

y asesinado cruelmente de varios balazos. 

Sus verdugos, 

Gilberto Márquez, 

Alberto Quiroz, 

José Hernández Ramírez 

y Gabriel Huerta, 

sepultaron el cadáver desnudo, 

y quemaron las ropas con petróleo.

El doctor Aureliano Urrutia Sandoval, 

enemigo profesional de Belisario Domínguez, le cortó la lengua 

(en un quirófano, y después lo mataron), 

y se la envió como un "trofeo"

 a su amigo Victoriano Huerta. 

Después de varias pesquisas 

de los senadores, 

de los parientes 

y de los amigos del doctor, 

se descubrió la verdad de los hechos. 

De acuerdo con la comisión investigadora 

que instrumentó el Senado, 

este hecho no fue comprobado, 

y el doctor Aureliano Urrutia Sandoval 

fue exonerado de dicha acusación.


Belisario Domínguez Palencia, 

in memoria.

Comitán, Chiapas; 25 de abril de 1863 

- Ciudad de México; 7 de octubre de 1913

Médico y político mexicano de ideología liberal.


ccp

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